Al tiempo en que la mayoría de la sociedad va hacia una recesión, la moda acompaña y las tendencias minimalistas no nos abandonan. Tomando mucha inspiración en la década de los 90 es que vuelve por completo el look andrógino, vestimenta monocromática y lo chic minimalista.
Es básicamente un revival de los 90, enfocarse en la pureza de los diseños en vez de la comercialización extrema, redefinir los estándares de belleza, abandonar lo políticamente correcto: un clásico ejemplo de esto son los pezones expuestos; retomar los clásicos de ropero como las pencil skirts color beige, tapados largos, trajes grises, pantalones de sastrería a la cintura, camisas y remeras blancas o blusas transparentes y un buen par de jeans.